Normalmente vemos en el cine una película animada, y automáticamente pensamos: es para niños. En lo personal, prefiero muchas películas animadas por encima de las ¨de adultos¨. Existen momentos inclusive en las que una película animada tiene un mensaje más poderoso que una no animada. Tal es el caso de la que quiero recomendar: Wall-E. Sí, Wall-E ,la del robot chistoso que sólo menciona su nombre en el trailer; la que casi nadie fue a ver porque estrenaron Batman.
Desafortunadamente, creo que la gente aún no estaba preparada para una película así, que siendo innovadora, retoma el cine silente de los principios, y nos lleva de tal forma a la vida de este pequeño robot, que terminamos amándolo. Eso sí, no nos podemos dejar engañar por la fachada adorable de la película; el mensaje que tiene es muy fuerte.
Wall-E (el robot,no la película) con sus detalles más que humanos, consigue sensibilizar a todo un conjunto de máquinas, en el cual están incluidos los seres humanos (aunque deberían considerarse aquí como animales).
¿Por qué la cito aquí,en un blog de liderazgo? Yo digo mas bien me preguntaría: ¿por qué no? Creo que si me pongo a enlistar la cantidad de cosas por las que creo que debe estar en este blog, se me acaba el espacio. Mejor les recomiendo que la renten y juzguen por ustedes mismos.
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